Por mis circunstancias personales y laborales, en mi entorno más cercano hay gran cantidad de personas dedicadas a la cultura y especialmente a la educación y a la música, algunos incluso a las dos simultáneamente.
Por ello he podido comprobar cómo, debido a la crisis y los recortes, en el sector musical están padeciendo injustamente la retirada de subvenciones y ayudas, desaparecen orquestas y escuelas municipales o asociaciones particulares y grupos de aficionados.
No es menos difícil el camino para aquellos que quieren iniciar su carrera musical en solitario o en grupo y para los que intentan dar clases particulares o los que quieren establecer una escuela o academia. A las dificultades habituales para el inicio de cualquier actividad empresarial (interminable relación de trámites necesarios e impuestos asfixiantes) se suman el aumento de precios y bajadas de salarios que nos obligan a la mayoría de nosotros a ajustar el presupuesto familiar al céntimo, con lo que hay que renunciar a los gastos que no sean vitales.
Y para colmo, al contrario de lo que sucedió el año pasado en Suiza, donde los ciudadanos aprobaron mayoritariamente en las urnas la incorporación de la educación musical a la enseñanza obligatoria de niños y jóvenes, aquí la opinión oficial menosprecia a las actividades artísticas en general y a la música en particular.
Personalmente estoy de acuerdo con lo que decía el maestro Igor Stravinski:
No basta con oír la música, además hay que verla.
También estoy convencida de que la mayoría de los profesionales y pymes relacionados con la música y con la educación musical cumplen una función muy beneficiosa para toda la sociedad, más allá de la mera utilidad económica, algo que tiene que ser ejemplo y camino a seguir para transformar el tejido empresarial, que demasiado a menudo se basa en una política económica en la que, por norma general, la rentabilidad inmediata e individual prima sobre las repercusiones positivas en la sociedad y la sostenibilidad.
Por todas estas razones, quisiera celebrar el retorno de las vacaciones veraniegas con una promoción exclusiva para músicos y escuelas de música. Desde el 1 de septiembre hasta el 22 de noviembre de 2013, los profesionales que contraten los servicios de SuelNet, tanto para la creación de páginas web como para sus campañas de medios sociales o marketing, tendrán un descuento del veinte por ciento sobre el total de su factura.